¿Porqué apostar por ventanas de madera?

¡Que cantidad de dudas surgen a la hora de elegir una carpintería exterior! y es que son muchas las cosas que hemos de tener en mente para realizar la mejor elección. En el post de hoy os resolvemos algunas de las cuestiones más comunes.

¿Porqué es mejor una ventana de madera frente al aluminio?

En un post anterior os hablamos de las múltiples ventajas que presentan las ventanas de madera frente a las de aluminio.

La primera de ellas es la de estar fabricadas con un material natural, renovable y respetuoso con el medio ambiente, lo que las hace idóneas para edificaciones donde la sostenibilidad es primordial, además, ofrecen máximas prestaciones en cuanto a sus características técnicas como estanqueidad, resistencia al viento y aislamiento acústico y presentan un mayor aislamiento térmico que las de aluminio o pvc puesto que en este caso el material con el que se fabrica la ventana sí resulta influyente.

¿Que madera elijo?

Existen distintas especies de madera, las más comunes coníferas y tropicales, comportándose cada una de distinta forma según la ubicación geográfica entre otros factores. En España, las especies más usadas son el pino y el iroco, aunque con la aparición de las maderas de última generación es frecuente encontrar carpinterías de madera termotradada o madera acetilada.

Las maderas del grupo de las coníferas como el pino, tienen mejor comportamiento en climas con humedad estable durante todo el año. Son maderas poco durables al exterior, a no ser que se traten en profundidad para ello, además de contener resinas que pueden exudar con temperaturas elevadas. Son por ello maderas menos longevas, que necesitarán mayor mantenimiento, siendo su coste menor que el de las tropicales.

Dentro de las coníferas el Pino Oregón y el Pino Tea son los más utilizados. Independientemente de la especie de coníferas empleada, la madera debe estar laminada, sin nudos y con el grado de humedad correcto.

Las maderas tropicales en cambio, se caracterizan por su durabilidad natural, aunque debido a su densidad suelen ser maderas más nerviosas por lo que es importante su selección sobretodo a lo que a la dirección de la fibra se refiere. 

Iroko, ipé, teca son maderas usuales para ello,  pero su trabajabilidad en taller es también importante.

El iroco concretamente es una madera fácil de trabajar en su aserrado, clavado y atornillado, muy estable una vez seca por lo que es muy recomendable en zonas costeras. 

Hay que tener en cuenta que algunas de estas maderas tropicales presentan problemas si se acaban en colores claros debido a los metales que pueden contener, pudiendo aparecer vetas de otros tonos.

La estabilidad de todas estas maderas aumenta con el laminado, es decir con maderas encoladas entre sí.

¿Puedo despreocuparme de una ventana de madera?

Concienciar al usuario final de la necesidad imperiosa del mantenimiento de la madera en exterior no es siempre tarea fácil pero es importantísimo. Cualquier madera con exposición debe ser tratada y mantenida en el tiempo.

Existen hoy día productos de acabados, como los saturadores de la madera, cuyo mantenimienro es muy sencillo, pasando sólo por limpieza y aplicación de dichos saturadores con paño humedecido. De esta forma el aspecto de la madera estará siempre como el primer día.

Con este post hemos querido resolver algunas de las dudas más frecuentes a la hora de elegir una ventana de madera. Para conocer más detalles técnicos o soluciones puede hablar con nuestro departamento técnico, donde le asesorarán sin compromiso.

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