En el corazón de Zaragoza, el estudio de arquitectura Tangram ha dado vida a un proyecto que va más allá de la mera rehabilitación. La correcta elección de las partidas en madera mayormente en roble, con sus curiosos revestimientos, hacen de esta obra un ejemplo digno a comentar. Hablando de interiores en madera, aquí te damos más detalles...
La esencia de la propuesta de Tangram para el Ático Alfonso se refleja en su enfoque sencillo y directo hacia la funcionalidad y la transitoriedad. La elección estratégica de esta ubicación no solo se basa en la panorámica excepcional, sino también en la oportunidad de revitalizar un espacio con geometría compleja.
Desde el generoso vestíbulo, estratégicamente ubicado en el centro de la vivienda, se despliega una distribución que redefine la experiencia habitacional. La sala de estar y el comedor ocupan un lugar preeminente, posicionándose de manera natural al frente. Este diseño fluido actúa como una extensión de las terrazas circundantes, creando una fusión armoniosa entre el interior y el exterior. La irregularidad de la cubierta, con sus pendientes a varias aguas, se convierte en una oportunidad única que se aprovecha al máximo, permitiendo que las vistas panorámicas se integren a la perfección en el espacio interior.
La cuidadosa disposición de una delicada escalera desde el comedor hacia la cocina no solo agrega un elemento arquitectónico distintivo, sino que también facilita la segregación de usos sin perder la continuidad espacial. Esta transición fluida entre áreas funcionales revela la meticulosa planificación de los arquitectos para optimizar la circulación y el uso del espacio.
Finalmente, los dormitorios, estratégicamente ubicados al norte en un segundo plano, garantizan la privacidad necesaria sin comprometer la conexión con el resto de la vivienda. Este diseño inteligente y funcional crea un equilibrio entre la intimidad personal y la fluidez espacial, destacando la atención de Tangram a los detalles y la comodidad del usuario.
La estructura del Ático Alfonso se convierte en un elogio a la madera. Tangram ha seleccionado cuidadosamente diferentes tipos de madera, desde parquet en espiga hasta lamas y revestimientos de roble, para dar vida a este proyecto. La elección de la madera no solo aporta calidez y belleza, sino que también se erige como un compromiso con la sostenibilidad y la conexión con la naturaleza. Detalles como la cuidadosa disposición de triángulos alistonados en la cubierta y la utilización de madera en elementos predominantes destacan la habilidad técnica y artística de los arquitectos de Tangram.
En retrospectiva, el Ático Alfonso por Tangram no es simplemente un proyecto arquitectónico; es una obra maestra que resalta la importancia de la madera en la arquitectura moderna. La conexión con la esencia de la naturaleza y la cultura se manifiesta en cada detalle. Este espacio, que una vez estuvo en desuso, ahora es un testimonio vivo de cómo la madera puede dar forma a la belleza, la sostenibilidad y la funcionalidad en perfecta armonía.
Entrada creada por: Grupo Gubia
Fuentes: metalocus / © TANGRAM
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