Esta casa está situada en una pequeña parcela de una zona residencial de Seya. Su dueño, un vendedor de una tienda de flores quería que la vegetación y las flores estuviesen presente en el diseño de la vivienda. Los arquitectos realizan este proyecto pensando en esa idea e introducen el espacio exterior en el interior a través de un patio de acceso a la vivienda lleno de plantas.
Este patio escondido por la fachada y por el que hay que pasar para
entrar en la casa no es ni un jardín ni una habitación sino un lugar
creado a medio camino entre ambos.
En el interior la estructura de madera se deja vista y los muros de
hormigón desnudos, con esto los arquitectos pretenden conseguir un
aspecto de arquitectura sin acabar que se presta a cambios futuros y que
permite la introducción de cualquier tipo de elementos externos
aportando fuerza y versatilidad a los espacios.
Más información: http://www.dezeen.com/2012/01/05/house-in-seya-by-suppose-design-office/
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