En torno a una escalera de teca

En Singapur se encuentra ubicada esta vivienda unifamiliar diseñada por el estudio de arquitectura A_Collective. Proyectada en esquina aprovechando el cruce de varias calles muy transitadas, se ha diseñado un exterior contemporáneo y de lineas puras para albergar en su interior una atmósfera acogedora y relajante que evoca las sensaciones de un santuario.

Todo el espacio interior gira en torno a una contundente e impresionante escalera realizada íntegramente en madera de teca que representa el punto focal más interesante e imponente del espacio pero que, a la vez, gana en ligereza gracias a su diseño flotante sin apoyo en suelo. A ello también ayudan los bañadores de luz natural horizontales que recorren los paramentos verticales hasta el techo. Es una pieza casi escultórica que aporta movimiento y ritmo al ambiente gracias a otra de sus singularidades: la ausencia de un pasamanos tradicional para, en su lugar, lucir tableros macizos de teca instalados de forma irregular y ascendente a medida que los tramos avanzan en altura.

Esta especie tropical ha sido la elegida, junto a la madera Borneo Ironwood, para dibujar el interiorismo prácticamente al completo de una arquitectura que se levanta en 8 metros de altura y que requería de materiales apropiados para resisitir frente a las inclemencias meteorológicas propias de un país tropical como éste.

 

 

Con la primera especie se pretende la durabilidad y resistencia de los elementos y revestimientos de la planta de acceso y algunas estancias del nivel superior en un contexto húmedo y de aguas; y con la segunda se aíslan dormitorios y zonas de noche incorporándola como segunda piel en el nivel superior de la fachada. En este punto, las lamas de madera se han dispuesto de forma vertical y se han dejado sin tratar para que el aspecto natural del exterior sea el predominante cuando se observa desde lejos.

 

Además, el uso de ambos tipos de madera ofrece una continuidad visual en toda la vivienda, contrarresta con su calidez la frialdad del resto de materiales empleados (el hormigón o el acero), y envuelve al interior de la casa en una estética armónica y equilibrada.  

 

Todo ello, así como la indudable relación existente entre los espacios inteirores y exteriores de la casa o el logrado fomento de la circulación de la luz natural por cada uno de sus rincones, ha favorecido y garantizado una agradable, confortable y rica experiencia de vida en su interior. Qué más se le puede pedir a un hogar, ¿no creéis? (Vía)