Os presentamos hoy la potente intervención llevada a cabo en la zona portuaria del distrito de Karşıyaka, en la ciudad turca de Izmir. El proyecto ha generado un espacio público para el esparcimiento de sus habitantes donde poder disfrutar de un lugar idílico, de una manera cálida y confortable mediante el uso de madera.
Este atractivo paseo peatonal ha sido ingeniado por el estudio Evren Başbuğ Architects como parte de la identidad del distrito y para la recuperación de la línea costera del conjunto de la ciudad. Su extensión alcanza una pasarela, sobre el arroyo Bostanli, que permite el enfrentamiento a la bahía en un lugar donde la línea del litoral se dibuja caprichosamente. En el extremo de la pasarela, continuando el paseo, un lugar para el recreo se abre a los ciudadanos para su recreo y aprovechamiento.
Una vez mas la apuesta por la madera en un ambiente marino juega un papel fundamental en el proyecto en cuestión, en este caso, la elección ha recaído sobre una madera de fresno termotratado. El fresno es una madera fuerte, estable y dura con excelentes propiedades de resistencia, en este caso sometida a una modificación interna por temperatura que, como ya os hemos contado en otras ocasiones en nuestro blog, le confiere una mejora notable en su comportamiento frente a las variaciones de humedad, con una gran disminución del equilibrio higroscópico, y por consiguiente una mayor estabilidad dimensional.
La sección longitudinal del nexo de unión en este paseo litoral nos muestra su desarrollo ligeramente arqueado sobre una viga metálica especialmente diseñada para permitir el paso de pequeñas embarcaciones hacia el embarcadero situado en el canal. En la parte posterior esta viga se respalda con unas cerchas verticales sobre las que recae la piel del proyecto, la madera de fresno termotratada.
Así, el puente va más allá de ser un mero elemento urbano de infraestructura utilizado únicamente como vía pública, sino que sirve como pieza de ocio y atracción pública, donde sentarse o incluso tumbarse.
Hacia el otro lado, en la continuación de la costa con orientación al oeste, se desarrolla un conjunto de plataformas en cascada, revestidas también de madera termotratada e instaladas sobre una estructura de acero. Estas se extienden en una pendiente artificial y están acompañadas por una arboleda sobre el propio terraplén del terreno. La simplicidad y la fluidez en la geometría de la superficie, así como la textura natural del material alientan al usuario a experimentar una relación más directa con el sol y el mar, pudiendo disfrutar de unas agradables vistas.
Son ya numerosos los proyectos en curso y ejecutados en nuestro país con madera termotratada. Este producto ratifica en cada uno de ellos su excelencia, haciendo frente a las diversas condiciones climáticas y exposiciones en las que puede colocarse con gratas garantías, pero sin olvidarnos nunca de la importancia en la elección de la materia prima.
¿Os gustaría poder disfrutar de espacios cómo este?
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