El proyecto nace en Scottsdale, Estados Unidos como una búsqueda del arquitecto chileno Jaime Inostroza por comprender el territorio. Inmerso en el desierto de Sonora, la estructura de madera se posa firmemente sobre el terreno, rodeada por pequeño murete de hormigón y piedra existente, el mismo se aprovecha y se imita aplicando la misma materialidad para generar grandes escalones que elevan hacia el ingreso al refugio. Escondido entre los arboles pero abierto hacia el desierto la retícula volumétrica formada por vigas y columnas de madera comprenden un espacio interior que se termina de cerrar con una suave tela, brindando la privacidad necesaria pero permitiendo el paso de la luz.
Nuestro segundo proyecto, del mismo arquitecto, pero ubicado en la Patagonia chilena consta de un mirador en el cerro Nielol y nace bajo el lema "Habitando un zaguán entre mamparas de Paisaje". Las antiguas casas de Temuco poseían un zaguán, una doble puerta antes de entrar a la intimidad del hogar, este un pequeño lugar a contraluz poseía una puerta de vidrio que dejaba visualizar el interior pero sin descubrir lo que hay realmente. Esta observación del habitar antiguo es lo que se quiso rescatar.
El proyecto se enfrenta al perfil de la ciudad, consta de 230m2 distribuidos en dos niveles, el nivel inferior y de acceso se define como lugar de estar y reposo, un espacio de descanso para contemplar el paisaje, que se vincula por una escalera interior-exterior con el segundo nivel que remata la estructura con un balcón superior.
La calidez del espacio de madera permite deleitar el paisaje urbano que se enmarca con la estructura. El espacio central se genera por una plataforma de 4x4mt de doble altura a la que se accede por un puente del mismo material, quedando todo el volumen elevado sobre la pendiente del cerro.
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