El estudio de arquitectura Langarrita-Navarro realizó el año pasado este proyecto para un evento musical que se celebraba en el espacio creativo Matadero, en Madrid. Durante un tiempo determinado este antiguo edificio industrial acogía este espacio efímero formado por cabañas de madera que albergaban oficinas, talleres para músicos y salas de grabación.
El carácter experimental, temporal y en cierta forma de urgencia (la
obra se ha construido en dos meses) determina las soluciones
constructivas del proyecto, realizado con materiales ligeros y buscando
un equilibrio entre estandarización y adaptabilidad, permitiendo la
reconfiguración del espacio y su fácil desmontaje y reciclaje en el
futuro.
“La
organización del programa determinaba una configuración específica
agrupada en cuatro partes: zona de oficinas, estudios para músicos,
estudio de grabación y una zona de conferencias, radio y lounge. Se han
buscando sistemas constructivos y espaciales que permitieran la
reconfiguración de los espacios para programas futuros.”
"Como
resultado el proyecto se despliega en el interior de la nave como una
estructura urbana disgregada en la que a través de la relación variable
entre proximidad e independencia, preexistencia y actuación sea capaz de
ofrecer escenarios imprevistos para la comunidad que lo habite."
Los mostradores, barras y mobiliario de las zonas comunes también se han construido con madera permitiendo su desmontaje al finalizar el festival o su traslado y uso en otras zonas del Matadero.
Para garantizar las condiciones acústicas que el espacio requería los estudios de grabación se insonorizaron con sacos de arena apilados para los muros.
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