30 de marzo de 2016

Carnicería de diseño en Melbourne


La madera de pino como uno de los materiales primordiales en un diseño que requería de ciertas dosis de calidez. Esa ha sido la motivación principal que ha llevado a los arquitectos y diseñadores del estudio australiano Fiona Lynch a emplear este noble material en la proyección de esta carnicería de diseño ubicada en Melbourne.


El local, de la década de los 60 y reformado al completo, rompe con el concepto tradicional que se tiene de los comercios del sector alimenticio, sobre de las carnicerías. Se aleja de la visión más tosca y rudimentaria de estas para hacer del espacio un lugar mucho más amable, delicado, elegante y sofisticado. Estética que, por otra parte, engrana a la perfección con el espíritu ecológico y sostenible del propio negocio.



Para desarrollar este entorno que, sobre todo, busca proporcionar una experiencia de compra enriquecedora y gustosa a los clientes, el proyecto se ha centrado en la mezcla de materiales. Como decíamos al comienzo, la estética clara y natural de una especie como el pino aporta ligereza y naturalidad a la carnicería. Material que se ha instalado en diferentes formatos y disposiciones para contrarrestar la frialdad y la masculinidad que ofrecen otros como las baldosas, el acero y la piedra también patentes en el establecimiento.




La mezcla de todos estos materiales da lugar a una atmósfera rica en texturas y de estilo contemporáneo que se acerca, incluso, a un concepto minimalista del espacio en sí. Las uniones entre tales materiales, sobre todo en el caso de la madera de pino con la piedra del sobre de la cámara frigorífica principal de más de 10 metros de longitud, han sido resultas con eficacia y gusto. Contrastes que se potencian también en los paramentos horizontales de la carnicería, dónde los revestimientos hechos a medida con listones de madera se juntan y diferencian del verde de los azulejos hechos a mano.

¿Qué os parece el diseño? ¿Os gusta tanto como a nosotros? (Vía)

1 comentario:

  1. A mi particularmente me encanta. La madera hace que el espacio luzca mucho más acogedor. A ver si toman nota en mi barrio jajaj

    Un saludo

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