He aquí otra de esas pequeñas grandes cosas que nos hacen la vida algo más fácil... ¡y mucho más divertida! Es lo que tiene el diseño y más, cuando va unido a la tecnología: que además de facilitarte el día a día al tener un claro propósito y función, te alegra la vista y hace que, hasta los objetos más cotidianos, puedan ser realmente reveladores y sorprendentes. Este que os traemos es otro de esos casos.
Lo que veis son unos puertos USB para el ordenador, aunque su objetivo -claro- es no parecerlo. Diseñar piezas que suplan una necesidad (en este caso de almacenamiento de información digital) pero que simulen ser otra cosa bien distinta (en este caso una línea de casitas escandinavas) es todo un proceso creativo en sí. Se trata de relacionar la utilidad del objeto en sí con la estética de cualquier otra cosa que pueda encajar y extrapolarse de alguna manera a la primera.
En este caso, por ejemplo, los diseñadores del objeto han relacionado las entradas de los puertos USB cuando las miramos de frente con las ventanitas alineadas de una casa. Han estirado el concepto y, desde ahí, han desarrollado el diseño. Esta idea, la de engañar o confundir al ojo y la mente - que para captar la verdadera realidad de lo que percibe necesita prestar un extra de atención- es en buena medida lo que hace que este tipo de diseños nos resulten atractivos, divertidos e ingeniosos.
Pues bien, empleando este concepto la firma japonesa Hacoa ha confeccionado su diseño en tres versiones distintas, pero todas -esos sí- utilizando madera, el material por excelencia en el mundo del diseño y la arquitectura del país nipón. En concreto, tres especies de madera diferentes como el arce, el nogal y el amaranto. Todas ellas acabadas con un aceite que le confiere esa apariencia extra sedosa y elegante.
¿Qué os parecen este tipo de diseños? Aquí os recordamos otro de origen japonés que, basado en otro concepto, también nos encantó descubrir en GUBIA.
Me gustan, sabeis donde poder comprarlos?
ResponderEliminar