Nos alejamos de la arquitectura y el diseño interior para mostraros
un curioso juego que hemos encontrado consistente en el apilamiento de
pequeñas sillas de madera. Pertenece a la empresa de juegos Ludus Ludi,
que se especializa en juegos sin reglas, que nos invitan a participar en un
juego puro.
Con el juego de las sillas jugamos a desafiar las leyes de la física y expresar nuestros impulsos y
sensaciones a través de la construcción de auténticas piezas
escultóricas.
La silla es un objeto que transciende su utilidad. No es en rigor una
pieza más del mobiliario. Una silla, para ser de verdad una silla,
tiene que haber sido capaz de establecer un vínculo afectivo con el que
la usa. Hay sillas de muchas formas y cada persona puede recordar
algunas en particular pero la representación de la silla, la silla
mítica, solo puede representarse a través de lo esencial, y lo esencial
de la silla es su arquitectura. Por eso hemos elegido esta tan
esquemática y sin adornos, el esqueleto casi, para representar a todas
en el juego de las sillas.
Son sillas que se pueden apilar, amontonar, dejar esparcidas por el
suelo, agrupar en formas azarosas o en difíciles equilibrios pero,
hagamos lo que hagamos con ellas, este juego nos deja jugar con las
reglas más primitivas, las de un niño que intenta retarse con el
equilibrio apilando objetos, y las más libres de la expresividad
artística.
Jugando con las sillas, dejándonos llevar por la ganas de
experimentar, aparecerán sensaciones inquietantes, emociones a veces
difíciles de expresar, las que sin buscarlas aparecen inesperadamente.
Las sillas se presentan descompuestas y se deberán montar antes de jugar. Se incluye una ya montada como referencia.
Más información: http://www.ludusludi.com/las-sillas/
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