Hoy os mostramos un auténtico Oasis Ecológico construido íntegramente con madera autóctona de la localidad en la que se sitúa Alajärvi, un pequeño pueblo en el este de Ostrobotnia en Finlandia.
El edificio situado en un valle, junto a una zona de bosque al lado de un campo de cultivo, fue proyectado por OOPEAA y responde a la petición del cliente de una construcción completamente ecológica. “Querían una casa de familia modesta, donde pudieran vivir sin electricidad. Y tenían buenas ideas ecológicas, como usar un número limitado de materiales locales que pudieran reciclarse tras la vida útil de la vivienda”, cuenta uno de los arquitectos.
El edificio situado en un valle, junto a una zona de bosque al lado de un campo de cultivo, fue proyectado por OOPEAA y responde a la petición del cliente de una construcción completamente ecológica. “Querían una casa de familia modesta, donde pudieran vivir sin electricidad. Y tenían buenas ideas ecológicas, como usar un número limitado de materiales locales que pudieran reciclarse tras la vida útil de la vivienda”, cuenta uno de los arquitectos.
La familia compuesta por un empresario, una artista y sus dos hijos requerían de un lugar donde vivir con espacios para sus distintas aficiones, un espacio de taller y un garaje de forma que la edificación se divide en tres módulos aislados revestidos con madera.
La casa se mezcla con el paisaje que lo rodea a través de su forma y materiales. La composición recuerda sutilmente a una granja tradicional finlandesa, donde los tres cuerpos se disponen creando un patio interior protegido de los vientos del norte que dominan en el valle, creando su propio microclima.
Las tres construcciones se realizan con entramado de madera aislado con gruesos paneles de fibra y revestido interiormente con tablas de abeto natural en la vivienda y pintadas de blanco en el taller para reflejar aún más la luz natural en sus acusados techos inclinados. Exteriormente listones verticales también de abeto revisten las distintas fachadas, abeto sin tratar asumiendo que la casa envejecerá naturalmente tornándose gris en las zonas expuestas y permaneciendo con su cálido color en las zonas más protegidas.
Los materiales y las soluciones técnicas dan lugar a un edificio saludable y ecológico que puede ser reciclado cuando alcance el final de su ciclo de vida. La calefacción de los espacios se da a través de cuatro chimeneas que su vez proporcionan agua caliente. Baterías que se cargan con la luz solar abastecen de energía a la edificación. Es posible vivir aquí sin depender de la red eléctrica y las redes de abastecimiento de agua.
Entrada creada por Grupo GUBIA
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